El aumento de volumen que sufren los senos y el vientre de la mujer durante el embarazo provocan la distensión de piel.
Cuando ésta no tiene la suficiente elasticidad para ceder o se reseca, se rompe en la dermis, dando lugar a la aparición de las antiestéticas estrías. Si quieres evitar su aparición, basta con que a partir del quinto mes de embarazo te adelantes al problema, aplicando en esas zonas una crema grasa, a ser posible con vitamina A, o una crema antiestrías.
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